De por sí, Matías tiene una excelente disposición y con sus actitudes te demuestra claramente que él es "un espacio seguro" para hablar.
Considero que "la manera de hacer terapia" de Matías es bastante novedosa para lo que uno puede concebir de la terapia tradicional, pues su forma de acercarse al paciente es -obviamente- marcando el vínculo psicólogo-paciente, pero su forma de ser hace que el vínculo deje ser tan serio, por lo que olvidas que "estás hablando con un extraño" y así te permite hablar relajadamente, como si fuese un amigo