Como psicólogo clínico, y desde un enfoque psicodinámico, centro mi trabajo en acompañar a mis pacientes en la exploración profunda de su mundo interno, ayudándoles a comprender los conflictos inconscientes que influyen en su vida emocional y relacional. Creo firmemente que a través de una relación terapéutica empática y reflexiva, es posible generar procesos de transformación duraderos y refundantes, que faciliten el autoconocimiento, la integración emocional y la posibilidad de construir caminos distintos a los que, de alguna forma, estaban predeterminados por experiencias que, en etapas primarias, dejaron una marca en su construcción psíquica.