Comprendo el acompañamiento terapéutico como un espacio seguro y de contención, que impulsa al ser humano a transitar sus distintos estados emocionales, conductuales y existenciales.
La Terapia como una instancia de reencuentro y reconciliación con la narrativa de nuestra historia personal, fortaleciendo los pensamientos, la consciencia individual y la experiencia anímica*