Mi nombre es Carlos Rau Moreno, soy médico cirujano formado en la Universidad de Chile, especialista en Medicina Interna de la P. Universidad Católica de Chile, especialista en Medicina del Estilo de Vida por el International Board of Lifestyle Medicine, Diplomado en Diabetes PUC. Trabajo en la Clínica Alemana de Valdivia desde el 2020. Fui académico por 4 años de la Universidad Austral donde coordiné la asignatura Salud Integrativa impartida a los becados de Medicina Familiar y Comunitaria y los módulos de Medicina del Estilo de Vida a los alumnos de medicina de 3er y 4to año. Desde el año 2015 dedico parte de mi quehacer profesional a la Salud Integrativa, habiendo trabajado la mayor parte del tiempo en el Centro Médico Integrativo Casafen de Santiago. Llegué a Valdivia a finales del 2019 en busca de una mejor calidad de vida, ya que soy amante de la vida de campo y la naturaleza. El enfoque de la consulta es una síntesis entre la Medicina Interna, Integrativa y la Medicina del Estilo de Vida. Se trata a los consultantes de manera individualizada, como seres multidimensionales (físico-biológicas, energéticas, emocionales, mentales y espirituales), con un importante énfasis en sus hábitos y estilos de vida, con el fin de restablecer sus equilibrios y ritmos naturales. Doy especial importancia a la nutrición, manejo del estrés y la ansiedad, al movimiento/actividad física, buen dormir/descanso, junto a la regulación de otros sistemas claves, como son la microbiota intestinal, la modulación de la inflamación sistémica, etc. Según cada caso particular utilizo antiinflamatorios naturales, probioticos, fitoterápicos, fórmulas ortomoleculares, medicamentos biorreguladores, vitaminas, antioxidantes, superalimentos, etc. Trabajo con un equipo multidisciplinario compuesto por profesionales en nutrición, salud mental, matronería, kinesiología, acupunturistas, masoterapeutas, etc. La apuesta de mi trabajo es que los consultantes aparte de volver a su equilibrio en salud, aprendan y adquieran herramientas para mantenerse saludable, logrando así, autogestionar su propia salud. Es clave para lo anterior que el consultante esté motivado y sea un protagonista activo del proceso terapéutico.